La Edad Oscura 14: Coronas de Latón

 

La historia del Imperio se escribe con sangre, pues esa es la única moneda que permite conseguir la Corona. Sangre derramada, de un modo u otro, para tomarla, y sangre derramada para mantenerla. Pero en aquel breve interludio entre conflictos, dos nuevas coronas de latón estaban surgiendo en puntos distantes, listas para quizás convertirse algún día en coronas de oro.

En Leagueheim, la poderosa Dama Winters ha usado todas sus argucias para evitar el nacimiento de la primera corona. Errores procedimentales, sobornos, retrasar los procesos, intentar conseguir los apoyos de los demás Gremios... al final los Talebringers de Seth se han convertido en uno de los Gremios reconocidos de la poderosa Liga Comercial, con asiento en el centro de Leagueheim y capacidad de voto y opinión sobre las importantes cuestiones que mueven la economía del Imperio.

Mientras tanto en Aragon Lisandro Castillo es nombrado Conde de unas importantes posesiones en Sutek, pero es una posición complicada: tierras importantes en un planeta que se muere, nombrado por un Príncipe que es enemigo de la Duquesa dominante, buscando un matrimonio con un Señor que no aprecia su baja posición de nacimiento. Y, sin embargo, pese a ello, surgen alianzas posibles y cauces para que, lentamente, la Casa Castillo de Sutek pueda llegar a la grandeza.

Pero ambos se encuentran de nuevo, tras su tiempo separados, en Byzantium Secundus, ante la Corte Imperial. Y, entre las pullas de la corte defienden un amor que la política y el estatus hacen imposible, pero que las palabras adecuadas y el acero de los sables permiten florecer. Y, bajo la lluvia sempiterna de la capital, los aceros de los Hazat y los al-Malik se cruzan cuando, a la desesperada, los caballeros de la segunda Casa contravienen la decisión del Emperador. Golpes, heridas y cuatro vidas perdidas... sangre derramada que la lluvia une en los sumideros de la ciudad con el resto de la ponzoña del centro del Imperio, el lugar donde el destino de las estrellas se forja entre alianzas y enemistades, insultos y halagos, maniobras a la luz y en las sombras.

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