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Mostrando entradas de mayo, 2021

La tiranía de Orden (Antología 4)

Señales y Portentos Diversos eventos complejos se suceden en las antiguas mitologías, así que procederé aquí a analizar un poco algunos de ellos, tal y como aparecen recogidos en los restos que nos han llegado. He intentado ordenarlos cronológicamente según ocurrieron, pero como todo ocurrió antes de que surgiese la vida inteligente, resulta (en el mejor de los casos) complejo. Procedo pues, texto por texto y fragmento por fragmento, en línea con la tradición académica y la metodología de Visarra. Apócrifa de Valladia : en torno al mundo del Caos, orbitando la tierra, surge un anillo de agua. Como siempre ocurre con el Caos, si tomamos la Apócrifa como válida, es difícil interpretar las razones que pueden llevar a que se produjese este cambio. Pero es innegable que se produjo, de modo que solo podemos achacarlo a lo Inconmensurable e Incomprensible y seguir adelante. Tablillas del Hecatternon: según ellas, Orden toma el nombre de Peyum, siguiendo el ejemplo de Vía. Esto es fácil de ent

El comienzo de la Vida (antología 3)

Karranmdur Kausat, la Canción Bajo el Fuego Somos hijos del fuego, somos nietos de la tierra, cambiando siempre pues ese fue nuestro parto Nacimos en los Volcanes, vivimos en los volcanes, morimos en los volcanes De los Volcanes aprendimos civilización y a ellos rendimos pleitesía El orden trató de hacer que le adorásemos, pero nosotros solo adoramos a quienes nosotros queremos A los Volcanes los sometimos, transformándolos en nuestros hogares móviles Y entonces escuchamos la llamada del Gran Fuego, en las profundidades del caos Muchos comenzaron a buscar la senda al Gran Fuego, muchos murieron en los tres caminos engañosos La mayoría se negaron a rendirle homenaje, y permanecieron en sus Volcanes, explorando Y, finalmente, algunos logramos recorrer las sendas hasta llegar al Gran Fuego y creamos nuestra civilización aquí a sus pies, sabiendo que jamás podremos volver Con el tiempo, el caos retiró el fuego del mundo y nuestros hermanos incrédulos se fosilizaron pero nosotros persistimo

Conflictos (Antología 2)

  Apócrifa de Bienallia, perdida antaño y re-encontrada en las cercanías del Lago Bii'kallet El Tiempo de las Hormigas dio lugar al conflicto, al choque, al enfrentamiento. El Caos Absoluto había intentado imponer su esencia a la creación, y el Orden Absoluto lo intentaría igualmente con el tiempo. Pero cualquiera de los Absolutos era un problema para Cambio, que entendía que ellos trastocarían el Equilibrio de las Esferas Cósmicas, todavía inestables. Palabra de Cambio. Y así llegó a pasar, que Cambio modificó todo, expulsando al Orden y al Caos Absolutos de la tierra, confinándolos al exterior. Era el comienzo del Ascenso. Era el comienzo de la Dualidad. Palabra de Tranformación. Entropía sabía de la rivalidad que Cambio sentía con ella, y temía ser ella también expulsada al exterior. De modo que produjo la primera Transfiguración, al ceder un poco de su esencia al Cambio, que ahora incluía en si mismo algo de Entropía.Pues, como dicen las Letanías, no hay Cambio sin Muerte. Inic

Al principio... (antología 1)

  Extracto del Deicrat duvas Sertta'ku (Códice de los Secretos) Nadie cree que sea posible, ¡pero yo lo he conseguido! Usando las vías de mi conocimiento y antiguas artes y magias, he visto el pasado y he visto el futuro. He visto lo que fue y lo que será, y he recorrido los caminos que los unen por sendas peligrosas e imposibles. Me llaman loco, demente, obseso, brujo... ¡que me llamen lo que quieran, no me importa! Yo lo he visto, se que es real, y que es distinto a cómo todo el mundo cree que fue. Porque, al principio, todo surgió de la tranquilidad y del vacío. Solo el tiempo y el espacio existían entonces, carentes de voluntad ni sentido, simplemente siendo. Y de pronto, surgió el Mar Infinito, el Reino de Caos, las Profundidades Inabarcables y las Corrientes Irreverentes. Y frente a él la extensión plana e infinita del Orden Perpetuo, la Organización Perfecta, la Simetría Reglada. Y así fue durante toda una edad, o quizás un minuto, porque de aquellas ni Kaos ni Orden estaban

La Edad de Plata 14: la Edad de Bronce

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Así terminó la Edad de Plata, la edad de los héroes, y dio comienzo la Edad de Bronce, el tiempo de los mortales. Hubo que viajar a Persia, donde convencer a los guardianes de la muerte que dejaran a los scions reunirse con la Reina Ereshkigal y que ella les permitiese liberar temporalmente a Enkidu. Hubo que convencer a Tiamat y a Ishtar de que colaborasen a la hora de hacer entrar en razón a Gilgamesh. Y juntos, los persas accediesen a invadir a los Primordiales, junto a los dioses aqueos.    Al final de la Edad de Plata hubo que viajar a convencer a los hebreos de que David debía promulgar una ley que prohibiese adorar a Yahve con motivos egoístas. Y así, el Dios que no Interviene se viese aislado y, con él, el resto de sus seguidores, capaces de negar al resto de los dioses y sus hijos.    Cuando terminaba la Edad de Plata hubo que viajar a Egipto, y convencer a Thoth de poner en marcha la versión menor de su plan. Hubo que convencer a Horus de la pertinencia del mismo y de la nece

La Edad de Bronce

Y así es como lo imposible se vuelve posible, cuando la fe de los mortales mueve las montañas hasta lo más impensable se vuelve inevitable. Es el Destino, al fin y al cabo, el camino trazado por la fe acumulada de todos, en cómo son las cosas y los dioses. En el mundo como lo entendemos y el papel que ocupamos en él. A través del fuego llegó el cambio. Como un bosque que arde para dejar la tierra fértil y lista para una nueva vida. Pero el cambio, como todo, genera resistencias. Y ninguna resistencia es mayor que la de los dioses, atados a quienes son, incapaces de cambiar o aprender. Como pequeños niños, juegan con el mundo y los mortales como si fueran adolescentes todopoderosos, riñendo y peleando cada vez que alguien les lleva la contraria o cuando algo quieren. Esa es su naturaleza. Al menos la de los dioses aqueos. Otros dioses son diferentes, serios y devotos a sus tareas, como los dioses egipcios. O quizás atados al destino y los extraños equilibrios de la luz y la oscuridad, c

La Edad de Plata 13: Imposibles Posibles

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  Los Hijos de Tuireann han robado reliquias por la Hélade, por Persia y finalmente en Italia. Sin embargo, confrontarlos no permite recuperar las reliquias, sino acaso algo más valioso, pues Mannanan Mac Lir es capaz de recuperar los restos torturados del alma de Farideh que permiten recuperar a la reina de Persia. Y eso inicia una cadena de proporciones cósmicas cuando Ahriman mismo se presenta, para intentar evitar la futura intervención de Ahura Mazda. Luz y oscuridad en eterno conflicto, orden y caos por siempre enfrentados.   Tras restituir un posible futuro mejor a Persia, le llega el turno a Egipto. Y entre argucias, la Corona del Alto y el Bajo Egipto es recuperada para descubrir que es falsa. Descubrir la localización de la verdadera requiere la intervención de Ishtar, que lleva a los semidioses al reino de los Dioses egipcios, donde Thoth sabe donde se encuentra la corona. Pero, más relevante, Thoth tiene una hipótesis, una idea, una locura. Una forma de terminar con la enfe

La Edad de Plata 12: Fantasmas

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  La ira de los Dioses es terrible de contemplar y vivir, pero hay algo peor que ella: el hambre de los Dioses. Como niños habituados a tener todo el poder y los recursos, que lloran cuando tienen hambre, los Dioses son capaces de exigir hasta lo más terrible cuando eso va a saciar su apetito. Y las consecuencias no les importan.    Kairos debe matar a Aegeus, a quien respeta y quiere proteger, porque su padre enfadado lo ha ordenado. Io intenta revivir las polis griegas, arrasadas en los combates y guerras. Y Elektra debe sacrificar a su amigo de la infancia, enamorado de ella desde hace años, porque su padre así lo exige.    Y es que los Dioses no negocian, no pactan, no respetan. Los Dioses exigen obediencia y fe, ciega y completa, sin sombras. Una vida entera de servicio y fe puede verse empañada por completo por una única falta, un único agravio, una única ofensa. Y el resultado es un mundo habitado por los fantasmas de los que quisimos, de los que odiamos, de los que conocimos,