Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2020

Marcus Augustus - A Thousand Year Old Vampire

Aviso: esta es mi primera partida de Thousand Year Old Vampire y puede contener ideas y spoilers para aquel que piense en jugarlo por su parte. Si ese es tu caso, juégalo primero y luego lee esto, para no perder sorpresas ni cosas en tu experiencia. Mi nombre es Marcus Augustus y nací veinte años antes de que Aníbal abandonase Cartago Nova con su flota, en la gloriosa e imponente Roma. Heredero de la familia Marcus, con mi nombre me legaron riquezas y propiedades, así como la posición social que me correspondía como uno de los patricios de la ciudad. También heredé la ambición de toda la vida de mi padre, la de convertirme en Consul en el Senado, algo que sin embargo no estaba escrito por los hados en mi Destino.  Esta es mi historia, desde el momento en que fui maldito por Nox, diosa de la noche, convirtiéndome en la criatura nocturna que soy ahora. Todo por culpa de ese endemoniado Valerius Evander, que rezó en su oscuro altar suplicándole a la diosa que interviniese, para apartarme

El futuro Emperador del Mundo

Imagen
Es así, lo he decidido, voy a ser el Emperador del mundo. Lo supe por primera vez cuando tenía doce años, allá en Nueva York, pero ahora con dieciséis ya lo veo claro. Todo el mundo parece emperrado en que lo ponga en marcha aquí en Tokyo, en mi segundo curso de este instituto para gente con poderes: que si haz un proyecto, que si participa en una beca, que si haz un proyecto grupal. Mierda, todo es pura mierda. La gente se toma demasiado en serio sus vidas.  Yo seré Emperador del mundo, pero no con dieciséis años. Primero quiero vivir un poco. ¿Sexo, drogas y rock & roll? Si, por favor, un poco más de todo ello.  Pero el resto se lo toma en serio. Que si construye un ascensor espacial, que si vamos a hacer que la gente encuentre a su amor verdadero, que si vamos a participar en torneos de artes marciales, que si vamos a encontrar trabajo a la gente parada, derrotar una banda criminal... menuda panda de aburridos. Y luego los proyectos individuales, unos por ahí curando enfermedade