La Edad Oscura 15: el Peso del Mundo

La belleza y la vida pueblan todos los Mundos Conocidos, bañados por la luz sempiterna de sus soles que proyectan la luz de la divinidad en el Empíreo. Pero, allá donde se encuentren los fieles del Pancreator, saben que los soles se enfrían día a día, por culpa de la carga de sus pecados. Pero desde la gloriosa y lluviosa capital de Byzantium Secundus a los campos verdes y fértiles de Aragon o las altas sedes gremiales de Leagueheim, la vida responde con su eterno canto a la llamada de Dios en lo más alto.
 
Pero los cantos de vida y energía a menudo toman giros inesperados cuando la vida misma se vuelve contra si misma y las causas de alegría y felicidad se tuercen en la oscuridad de la tragedia. Y el amor de los trágicos amantes al-Malik se ve truncado cuando, abrazados, son lanzados fuera del airlock del transporte en que eran llevados a salvo, cuando su propia Casa exige su muerte por un amor que trasciende las posiciones nobiliarias de ambos. Pero, protegidos por la Casa Real Hazat, amparados por la protección del Emperador de estos cansados soles, la llegada de la flota al-Malik a Byzantium Secundus amenaza con la guerra entre ambas Casas.
 
Pero en la política de Byzantium Secundus a veces hay que tragar veneno y serpientes por el bien necesario. Y Lisandro aprende eso por las malas, cuando debe tragarse su orgullo y su honor, su hospitalidad violada al ser asesinados los jóvenes poetas, y conseguir un acuerdo patrocinado por la Casa Decados que no solo evita la guerra entre Hazat y al-Malik sino que consigue que una fragata de los al-Malik se una a los esfuerzos bélicos en Hira contra los herejes kurganos.
 
Y mientras tanto, una conversación con el Emperador lleva a Seth a iniciar una nueva aventura en Sutek, en busca de los cultos antinómicos adoradores de la Oscuridad entre las Estrellas que amenazan con extinguir los soles mismos. Atrás quedarán las cenas de promesas sensuales con la Duquesa Salandra, los consejos privados y públicos y el Emperador, pues bajo la bandera de la Compañía del Fénix, deberá liderar la expedición en busca del tercero de los archidemonios, si es que las teorías son correctas.
 
Y así, los dos de nuevo unidos se adentran en nuestra busca, camino de las tinieblas de los secretos del segundo de los mundos que colonizó la humanidad hace ya tres mil años. Y sobre sus otrora fértiles praderas, como huesos desnudos expuestos a la luz de un sol cada día más frío, los secretos de otros tiempos acercarán a ambos a las respuestas que quizás nunca desearían haber descubiertos. Pero es que ese es el puzzle de la vida, querido espectador, ese que nosotros solo buscamos acompañar y guiar hacia las promesas que se le hicieron al principio de los tiempos. El resto, es solo mala prensa.

 

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