Tiempo de Anatemas 49: El azulado resplandor de un amanecer incipiente
Hubo un tiempo en que la luna brillaba con una fuerza imparable, inspirando a los amantes en los puentes y a las poetisas que escribían con su embrujo. Pero desapareció y cuando regresó lo hizo menguada, algo deshecho ahora, más de mil años después, cuando una joven pelirroja abre unos ojos no humanos ante Haz Argenta y Xiao Baozi que le dan la bienvenida de vuelta. Y juntos, el oso, la pantera y la loba corren entre los bambus bajo la luz plateada y la roja loba se detiene para aullar su amor al astro que ha recuperado toda su fuerza. Lejos de allí, la Corona de la Creación vuela hasta la ciudad de Jiara, donde los solares buscan evaluar el estado de la ciudad y su evolución. La encuentran tranquila, reconstruyendo, sanando sus heridas bajo el gobierno temporal de Khidara Weilan. La joven se halla en el salón principal de la manse, organizando con sus ayudantes las nuevas posibles rutas comerciales que se abren con los Ragara de Port Cailyn. Con solicitud y devoción comparte con ellos...